sábado, 28 de noviembre de 2009

Historia de la magia

Historia de la magia y el ilusionismo

Antes de entrar en el origen de la magia y del ilusionismo me gustaría transcribir la definición que califica dichas palabras en el diccionario: magia o ilusionismo es «el arte de realizar hechos aparentemente inexplicables, maravillando y entreteniendo a todos los públicos. Sorprende porque recuerda lo sobrenatural basándose en el misterio».
La magia estimula la imaginación y la fantasía creando un reto a la razón. Además distrae, por lo que se convierte en un hobby que no sólo disfruta el que lo realiza sino también el que lo contempla.
Probablemente la magia sea tan antigua como el mismo hombre. Se le tuvo un temor reverenciar antes de asignarle un nombre, e imponía un terror mucho más grande que el que inspiraba cualquiera de las catástrofes naturales que integraban la azarosa existencia del hombre prehistórico; de este modo llegó a constituir el primer intento humano por comprender y dominar el mundo, a representar el poder, poder por controlar lo que no se podía entender. Fue, en resumen, la primera religión.

Los orígenes de la magia
En distintas excavaciones arqueológicas han sido identificados cuencos y bolas que sugieren la idea de que el truco de las copas y las bolas pudo haber tenido su origen en una época tan remota como la Edad de Piedra.
En la pared de una cámara mortuoria de la ciudad egipcia de Benl-Hasan se encontró un jeroglífico mural que representa a dos hombres dedicados a realizar con unos cuencos en forma de copa lo que parece un truco de ilusionismo. Los jeroglíficos que explican el dibujo parecen confirmar que debajo de uno de los cuencos se encuentra escondida una bola o algún otro pequeño objeto a punto de aparecer por arte de magia.
Este descubrimiento da a entender que dicho juego era muy corriente en el Antiguo Egipto y en Babilonia.
Otros jeroglíficos que datan aproximadamente del año 4000 a. de C. nos narran las proezas de un mago egipcio llamado Dédi, quien, en presencia del poderoso faraón Keops, en cuyo honor se erigió la pirámide del mismo nombre, decapitó a un pato y colocó la cabeza en un extremo de la estancia del faraón; los jeroglíficos cuentan que el cuerpo del animal se levantó y empezó a moverse, lo mismo que la cabeza, hasta reunirse ambos en el centro de la sala; una vez allí, la cabeza se unió nuevamente al cuerpo, quedando el pato restablecido, que empezó a graznar alegremente como si nada hubiera pasado.
He aquí la primera sesión de prestidigitación conocida en toda la historia. Evidentemente, los jeroglíficos no nos descubren los secretos del mago.

La magia en la Biblia
La Biblia nos cuenta en uno de sus pasajes que encontrándose Moisés y Aarón en presencia del rey de Egipto, y con el fin de liberar a su pueblo conducirlo a otras tierras, Moisés transformó su báculo en serpientes para demostrar que su misión era de origen divino. La historia nos sigue proporcionando hechos fantásticos relacionados con la magia: desde cuentos de sabios de Oriente, magos griegos, misterios árabes e incluso magos hindúes, hasta llegar a Merlín, mago de la corte del rey Arturo, a quien se le atribuyeron poderes sobrenaturales. Pero relatar todas estas historias nos llevaría cientos y cientos de páginas. Demos pues un salto en la barrera del tiempo y situémonos en el siglo XVI, cuando se publica el primer libro en inglés que menciona el ilusionismo. Escrito por Reginald Scot, El descubrimiento de la brujeríai describe los trucos y métodos entonces en boga. Un gran número de aquellos sorprendentes trucos todavía los realizan hoy grandes magos.
La tierra de las noches de Arabia
Para todos nosotros Asia destaca como el continente romántico de la mística. 'Las historias de las noches de Arabia nos mantienen hechizados con su encanto fantástico. Aladino y la lámpara maravillosa vivirá para siempre en nuestras mentes. Creo que estas historias reflejan los pensamientos y las creencias de mediados del siglo.